Volvemos a incursionar en esta sección donde repasamos la historia, personas, personajes y momentos fundantes dentro de estos 121 años que va a cumplir el Club de Gimnasia y Esgrima. En esta ocasión, pondremos foco en los orígenes de una de las actividades con más deportistas con la que cuenta nuestra institución: el Vóley. Y lo haremos repasando los detalles de cómo se inició la actividad, recreado en la memoria privilegiada de Néstor Millen, autor de las siguientes líneas
El Vóley en Gimnasia y Esgrima by Neco Millen
La memoria “se acomoda” y no recordamos exactamente cómo sucedieron las cosas de varios años atrás, pero puedo asegurar que aproximadamente así fueron los hechos.
Estando la pileta chica (donde ahora está la pileta de lona) transversal a la vieja y donde ahora está el playón (próximo a renovarse), habíamos transformado el campito en una cancha de fútbol con pasto, arcos con red, marcación con cal y alambrados protectores en el sector vecinos. La cancha de básquet era abierta y ubicada de sur a norte.
Un verano, no recuerdo de donde salió la red, hicimos partidos de vóley, con amigos y amigas tipo vóley playero a la siesta, tomábamos sol y jugábamos ”vóley vale todo”.
En esa época, casi no había actividad para las mujeres; pileta en verano y alguna clase de gimnasia femenina. Eso lo hicimos dos veranos más y surgió la idea de que podía ser una buena actividad para las mujeres.
Se empezó a hacer el techado del nuevo gimnasio y quedó la cancha de básquet techada, todavía de sur a norte.
Un día decidimos armar un equipo de vóley e inscribirnos en la Asociación Santafesina de Vóley en categoría novicios. Armamos el equipo con jugadores de basquetbol en actividad: Raúl Parolín, Juan Carlos Glorioso, Mario de Pró, los cuales habían practicado vóley y yo, Neco Millen, que tenía la mínima noción de los partidos de verano. Se sumaron a nosotros, Nino Massa, pelotaris, dos estudiantes de abogacía, pampeanos. Uno creo era de apellido Villa. Había otros dos, uno se apellidaba Cardinale y era pelotaris. Era el grupo de los pampeanos, personajes recordados y queridos por los de aquella época; y por último otro estudiante de Concordia, no recuerdo su nombre.
De este equipo de novicios, iniciador del vóley oficial, había varios qué en los partidos, según algunos fallos dudosos, entraban en “estado de posesión” en la protesta que a veces asustaban (Glorioso, Parolín, Nino y el concordino)..
Tuvimos mucha colaboración de la gente del Club Teléfonos de Guadalupe. Les comentamos cual era nuestra idea en relación al vóley. Nos invitaron a un torneo preparatorio antes del oficial y nos fue mejor de lo esperado. Empezamos el torneo oficial y se nos ocurrió hacer un torneo interno como para promocionar el vóley en el club. Pensamos que íbamos a ser unos pocos y para sorpresa hubo una gran cantidad de participantes. La gente de Teléfono colaboró y nos prestaron redes.
Arrancamos un domingo 8 de la mañana, eliminación simple. Nos querían matar los que perdían. No nos daba el tiempo ni las canchas para doble eliminación (es idea de jugar al menos dos partidos). Recuerdo el enojo y la protesta del entrenador Sternad. Mientras nos retaba uno de los pampeanos me pedía caramelitos mientras jugaba, porque le bajaba la glucemia, era diabético. Arrancamos mal en la promoción.
En el torneo oficial la llevábamos bien dentro de todo, al jugarse en el club, se arrimaba gente. De paso fuimos explicando lo que había sucedido en el primer torneo interno. Organizamos un mejor torneo, con doble eliminación. Y a partir de ahí se animaron algunas chicas, se armó el primer equipo de novicias. Se sumó a colaborar Don Campero, gran persona, fue realmente un gran apoyo. También se sumaron varones y los del básquet nos fuimos retirando (habíamos jugado un año en el torneo oficial de Vóley).
Luego se cambia la orientación de la cancha de básquet, como es actualmente y al lado queda la de Vóley.
Al equipo de mujeres lo dirigió Nino Massa. Luego vino el profesor de vóley, Ariel Pons. Nino tenía mucha voluntad, armó un lindo grupo pero le faltaban fundamentos y había que subir un escalón.
Tiempo después hubo un conflicto en el vóley femenino de Regatas y vinieron a Gimnasia (Recuerdo a Sara Peña , Vilma Velázquez, no recuerdo el resto). Ya nos habíamos desligados del Vóley y dedicados solo al basquetbol. Ya era otro nivel y se amplió el número de jugadores de ambos sexos y participación en nuevas categorías. También hubo distintos Directores Técnicos.
Mi hijo empezó basquetbol pero lo entusiasmó más el vóley. El profesor Ariel Pons hace años que está involucrado en el vóley del club formando parte de todo este proceso
Esto es la historia del comienzo del vóley en el Club de Gimnasia y Esgrima. Cuando veo tantos chicos y chicas (incluso nietas de un gran amigo) me da una gran satisfacción y alegría. Recuerdo a los que iniciamos, los que tuvimos la idea de ampliar la actividad para las mujeres y me digo “misión cumplida de la idea”.
La idea original de más actividades para las mujeres del Club se dio. Lógico, luego con la ayuda de las piletas techadas, con calefacción, más turnos de gimnasia y otras actividades que se fueron agregando se amplió la oferta de actividades.
Como es un aporte para el Vóley y la historia del Club, si alguien puede agregar o corregir lo aquí expuesto (Profesor Ariel por ejemplo), bienvenido sea.